Por solicitud de los feligreses de Girón, residentes en el sitio del Pie de la Cuesta, fue erigida el 17 de octubre de 1774 en el llano de San Francisco la Parroquia de "San Francisco Javier" por el patronato eclesiástico conformado por las autoridades del Virreinato de la Nueva Granada (Arzobispo, Fiscal de la Real Audiencia y Virrey).
Asentadas desde 1763 en el sitio del Pie de la Cuesta, algunas familias de blancos, mestizos, mulatos y "libres" se comprometieron en 1772 ante el cura párroco de Girón, Dr. Joseph Elseario Calvo, a erigir una capilla a cambio de la solicitud de la erección de una viceparroquia ante las autoridades virreinales. Proceso que se concretó un año después al ser señalado con una cruz el lugar de ubicación de la capilla de palos y paja que fue construida como origen del asentamiento urbano. A lo cual siguió la solicitud de erección de una nueva parroquia en la jurisdicción municipal y provincial de Girón, previo acuerdo con el cura párroco que sustituyó al Dr. J. Calvo quien se oponía a perder a los feligreses más prósperos que aseguraban su congrua e ingresos por concepto de diezmos.
Piedecuesta antigua
Llegado a la parroquia en los últimos días de diciembre de 1775, el 26 de julio de 1776 el presbítero José Ignacio Zabala reunió a los vecinos principales de su feligresía para acordar la constitución parroquial que debía regir su jurisdicción en cuanto a limosnas, congrua, mayordomo, cofradías, etc. Ese acuerdo fue rechazado por la mayoría de parroquianos quienes se oponían desde 1774 a la elección de ese presbítero como su primer cura párroco al considerarse engañados por el bando socioeconómico representado por la familia de Blas Mantilla a quien le habían confiado su poder ante las autoridades de Santafé.
Dicho conflicto fue dirimido solo en julio de 1778 al ser enjuiciadas las partes por el Visitador y Fiscal de la Real Audiencia, Francisco Moreno y Escandón, durante su visita a la provincia al considerar que los parroquianos por sus conflictos habían descuidado el cultivo y cosecha del tabaco estancado. Por solicitud de los vecinos de Girón y feligreses de la parroquia de San Francisco Javier, el rey Fernando VII concedió a esa parroquia el título de "Villa de San Carlos" el 16 de agosto de 1810.
Un mes antes al rebelarse y desconocer las autoridades regentistas de Girón la Junta de Gobierno de los insurgentes federalistas de Pamplona le otorgaron el título anhelado como Villa al ser una Parroquia cuyos vecinos estaban dispuestos a asegurar la independencia nacional de España y los españoles.
Obtenido por las vías de hecho y en derecho ese título político-administrativo le permitió constituirse en una municipalidad independiente de Girón con Cabildo, rentas, alcaldes, cárcel y rentas propias. Sellada la independencia nacional en 1819, la Ley de la República de Colombia del 23 de junio de 1824 reconoció la existencia de esa municipalidad como la "Villa de Piedecuesta".